El Realismo Mágico en HCH de Luis Leal

 

-El términoRealismo Mágicofue usado por el crítico Franz Roh para “designar la producción pictórica de la época postexpresionista europea iniciada hacia 1920”.

-En las artes plásticas el realismo mágico es una tendencia enteramente opuesta al expresionismo

-No es así en la literatura, aunque sí hay diferencias entre las dos escuelas.

-El expresionismo da importancia a los elementos fantásticos o sicológicos

-En el realismo mágico se evita lo sobrenatural y la conducta del hombre no se explica por medio del análisis psicológico.

-El fin es el de captar el misterio que se oculta tras la realidad

-El expresionista quiere evadir esa realidad creando mundos irreales

-En el realismo mágico el escritor se enfrenta a la realidad y trata de desentrañar su misterio.

-Ya en 1948 Arturo Uslar-Pietri apuntaba “Lo que vino a predominar en el cuento y a marcar su huella de una manera perdurable fue la consideración del hombre como misterio en medio de los datos realistas. Una adivinación poética o una negación poética de la realidad. Lo que a falta de otra palabra podría llamarse un realismo mágico”

-En el realismo mágico los acontecimientos claves del cuento no tienen una explicación lógica o sicológica.

-el autor no tiene necesidad de justificar lo misterioso de los acontecimientos como lo hacen los escritores de cuentos fantásticos (Borges, Bioy Casares)
-En la literatura fantástica lo sobrenatural irrumpe en un mundo sujeto a la razón

-En el realismo mágico—según Franz Roh—“el misterio no desciende al mundo representado, sino que se esconde y palpita tras él”

-Para captar los misterios de la realidad el cuentista magicorrealista exalta sus sentidos hasta un estado límite que le permite adivinar los inadvertidos matices del mundo externo, ese multiforme mundo el cual da expresión sus relatos

Hasta aquí Luis Leal

 

Los términos “Realismo Mágico” y/o “Real Maravilloso” han sido muy problemáticos. A veces se han se han confundido, a veces se han aplicado de distintas maneras. Hasta la fecha, casi han perdido sentido. Por ejemplo, aunque Luis Leal sitúa a Novás Calvo dentro del género del “realismo mágico” por “el deseo que el autor manifiesta de recrear formas primitivas de expresión, por el intento de borrar el tiempo por medio de la fusión del pasado y del presente y por la creación de personajes que poseen un pronunciado sentimiento intuitivo” Menton sitúa el cuento que leímo de Novás Calvo dentro del existencialismo, movimiento opuesto a las coordenadas del realismo mágico.

Para una idea mejor del Realismo Mágico, que no queda explicada en Luis Leal, impriman el artículo de Eva Lukavská en la web http://www.phil.muni.cz/rom/erb/lukavska91.pdf

 

A menudo el Realismo Mágico y lo Real Maravilloso se han utilizado intercambiablemente.

Según Lukavska, a diferencia del realismo mágico, lo “real maravilloso” fue formulado por un escritor (Alejo Carpentier (1904-1980) en el prólogo de su novela El reino de este mundo(1949)) y no por un teórico (Franz Roh). En el prólogo Carpentier dice:

1) La realidad americana está dotada de privilegios estéticos extraordinarios en comparación con la europea

2) para ver lo “real maravilloso” americano el escritor debe creer en su existencia “la sensación de lo maravilloso presupone una fe”. “Lo real maravilloso” es un concepto clave que comprende como el único recurso de una literatura auténtica. Lo maravilloso, adoptado del surrealismo, es usado por Carpentier de manera opuesta al europeo. Lo “real maravilloso” americano presupone una actitud hacia la realidad basada en la fe. Esto comprende dos aspectos:

1) una cualidad estética extraordinaria de la realidad americana

2) la capacidad del escritor de percibir esta cualidad y de transformarla en literatura

No son las capacidades creadoras del escritor sino su creencia lo que le hace producir lo real maravilloso (69)

 

Para García Márquez lo “real maravilloso” reclama la voluntad del escritor de representar lo real como mágico. Está de acuerdo con Carpentier en lo que toca  al hecho de que la realidad americana es extraordinaria. Para percibir bien esta realidad el escritor tiene que liberarse de los prejuicios racionalistas (71).

La literatura según García Márquez, no puede ser fotografía de la realidad, al contrario tiene que ser su síntesis. Uno de los deberes del narrador es de encontrar los recursos adecuados para expresar esta síntesis. Fue la abuela de García Márquez quien le ayudó a solucionar este problema, al eseñarle el estilo de la narración popular y Franz Kafka al mostrarle que la literatura se puede hacer de la misma manera de que una del pueblo relata historias “Para ella los mitos, las leyendas, las creencias de la gente, formaban parte, y de manera muy natural, de su vida cotidiana. Pensando en ella me di cuenta de pronto que no estaba inventando nada, sino simplemente captando y refiriendo(…) que era muy nuestro, muy latinoamericano. (…)…aquellos hombres que en nuestro país consiguen sacarle de la oreja los gusanos a una vaca rezándole oraciones. Toda nuestra vida diaria, en América Latina, está llena de casos como ésta” (72.)