Pedro
canta Raúl Paz
No le hizo caso al corazón
Se equivocó, se equivocó
No le hizo caso al corazón
Se equivocó, se equivocó
Pedro vivía, soñando
con la luz de un escenario y un tambor las manos dando vuelta sobre el cuero de algún son y las pupilas recorriendo los aplausos.
Pedro el músico, así ya le llamaban
los muchachos a su edad tan sólo doce años y te hacía una canción con tanto orgullo con tanto corazón.
Pero al llegar a casa todo había que olvidar tenía que ocuparse de otras cosas más precisas.
La música es tan sólo cuestión
Pero al llegar a casa, todos con felicidad miraban con orgullo al muchacho que aunque su risa grande no se siente ya el sigue los consejos paso a paso.
Pedro cansado de acomodar su vida con palabras de otra voz de repartir promesas que al final nunca sintió, salió a buscar lo que quedaba en la vieja canción.
Pero al llegar a casa todos quisieron gritar...oye y Pedro sin oír, tomó su sueño aquel que siendo un niño le hicieron negar su sueño de tambores y escenarios.
No le hizo caso al corazón
Se equivocó, se equivocó
No le hizo caso al corazón
Se equivocó, se equivocó
Se equivocó el muchachito
y tanto se equivoco que el mundo se hizo chiquito hasta
que retificó
No le hizo caso al corazón
Se equivocó, se equivocó
Por las calles de la Hababa
suena y suena su tambor y las
muchachas reclaman porque anoche no tocó, tocó
No le hizo caso al corazón
Se equivocó, se equivocó
Oye mira cuando el negrito
llegó a su casa todo el mundo le gritó pero él siguió batallando hasta que lo consiguió, lo consiguió.
Cuando él era chiquitito le negaron condición y ahora lo mismo te toca bolero
y guaguató.